Parece que esta rubia tiene muchas ganas de torturar a alguien, y su esclavo tiene todas las papeletas para ser el elegido. Ella dirá cómo ponerse y cuándo se le permitirá respirar ¿Que le duele la cara? A Ella ni le importa.
Posts Tagged ‘Tejanos’
Estas chicas no paran de sorprendernos. Teodora, Joss y Maya vuelven con un vídeo trample de lo más ‚hot‘, el cual su esclavo resistirá a todo tipo de humillaciones ¿Serías capaz de resistir todo este tipo de humillaciones a cargo de estas Diosas?
Seguro que cuando viste a Anina te entraron ganas de conocerla. Ella siempre está abierta a todo tipo de esclavos fetichistas respetuosos y sumisos. Pero deben pasar por unas pruebas…¡ya puedes imaginarte de qué trata!
Los verdaderos fetichistas de los culos han pasado alguna vez por una sesión facesitting. Una Ama dominante con ganas de humillar a un pagafantas, enseñarle el culo bien de cerca y utilizarlo como una simple silla…
Si no quieres acabar como esas cajas, con tu cara destrozada, vale más que vayas haciendoc aso a todo lo que Amanda Rey te ordena. Si te saltas cualquier norma, acabarás pateado y expulsado de su séquito.
Ver Vídeo
Visita la web de Amanda
Este esclavo solo tiene un destino: ser humillado por Jamie Kate. Esta chica no se cansará nunca de verlo sufrir, de imponer su poder femenino, el poder del facesitting. Él está completamente atrapado, sin escapatoria, y nunca podrá librarse de la maldad de una Ama como Ella.
Amamos a todas esas chicas que deciden tener el rol dominante. Que están abiertas a nuevos castigos dedicado a sus esclavos. Como Rayana, que invita a su esclavo con el único propósito de romper con su aburrimiento, de sentirse dominante, sentirse como una Diosa.
Halloween es una fecha para el dolor, y también la humillación. En este caso se trata de humillación pura y dura, y es que a Cassandra se le ha ocurrido castigar lamiendo sus pies a todos aquellos pagafantas que no tengan la cantidad sufiente que Ella exige por sus caramelos…
Esa sensación en la que tu Ama prueba unas nuevas botas de suela dura y te elige a ti como víctima. No sabes lo que va a hacer, hasta que ves que te obliga a extender tus manos en el suelo. Empieza a andar de un lado para otro, pisándote las manos, sin piedad. Solo puedes estar agradecido a Madame Marissa, no tienes derecho a quejarte.
Esta vez fue distinto. Amber cogió un peluche y empezó a aplastarlo con su culo, con esos tejanos ajustaditos que a cualquiera se le caería la baba… Aunque esta vez fue un peluche en vez de un sumiso pero…¡quién sabe si la próxima vez podrías ser tú!